Refinería de cal convencional (Grey)

La conversión de cada tonelada de cloruro de litio en carbonato de litio de grado técnico (TG) requiere casi dos toneladas de carbonato de sodio como reactivo. Luego, la conversión posterior de carbonato de litio-TG en hidróxido de litio grado batería (BG) requiere cal y ácido clorhídrico (HCl) como reactivos. En algunos casos, una refinería de litio gris puede consumir 5 toneladas de reactivo y generar hasta 14 toneladas de desechos y dióxido de carbono (CO2) para producir una sola tonelada de hidróxido de litio-BG.

La refinación de litio gris es una vía con un uso intensivo de sustancias químicas que da como resultado:

• Montañas de reactivos (cal, carbonato de sodio).

• Transporte costoso de reactivos hacia y desde sitios remotos.

• Se generan grandes cantidades de residuos cuya eliminación es difícil y costosa.

• Altas emisiones de CO2.

• Baja recuperación de litio (pérdidas de litio del 8 al 12 %).

• Alta intensidad energética.

• Alto consumo de agua dulce.

• Lo que conduce a un alto OPEX/tonelada.

• Requiere un alto CAPEX en equipos y activos fijos.

Cada año, millones de toneladas de carbonato de sodio, cal y/o ácido clorhídrico se transportan miles de kilómetros hacia o desde sitios remotos para apoyar al sector de refinación de litio gris.

Todos estos factores hacen que la refinación de litio gris sea innecesariamente compleja, derrochadora desde el punto de vista financiero y medioambientalmente insostenible. El procesamiento de litio gris enfrenta una ardua batalla para multiplicarse por diez en la próxima década sin incurrir en costos significativos, tanto financieros como ecológicos.